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La CERA presenta la Estrategia Argentina Exportadora, teléfono para la política...

La CERA, Cámara de Exportadores de la República Argentina, lanzó la Estrategia Nacional Exportadora (ENE). Una muestra sustancial desde la entidad que pone blanco sobre negro en cuanto a mostrar la necesidad de llevar a la práctica el amplio consenso en torno a la necesidad de aumentar las exportaciones argentinas para generar empleo, y disponer de divisas que, además de facilitar el acceso a distintos bienes, permiten comprar insumos, repuestos, tecnología y servicios fundamentales para el crecimiento económico.

La CERA viene presentando documentos de este tipo a lo largo de los años en este sentido, para un despliegue programático de las exportaciones y este documento vuelve a insistir, claro que se viene de necesidades más básicas en la materia. El documento posee más de 140 propuestas técnicas a ser implementadas en distintas áreas de gobierno, independientemente de quien resulte ganador de las próximas elecciones, se basa en un estudio que realizó el Instituto de Estrategia Internacional de la CERA de experiencias similares en otros países, el análisis de las principales tendencias del contexto global, y encuestas enviadas a la mayor parte de los exportadores del país.Señala el informe que este aporte técnico, basado en datos duros y mejores prácticas internacionales, considera asimismo los desafíos específicos de Argentina, agrupados en 6 pilares: 1. Relacionamiento externo, 2. Impuestos y restricciones a las exportaciones, 3. Facilitación del comercio, 4. Logística, 5. Financiamiento y 6. Inteligencia y promoción comercial.

Algunos temas tratados en la ENE son la situación geopolítica actual, el futuro del Mercosur, el acuerdo Mercosur-UE, alineamientos en ámbitos multilaterales, retenciones, restricciones cambiarias, medidas de facilitación del comercio, institucionalidad y transparencia, Puerto de Buenos Aires, Hidrovía y VNT, y opciones de financiamiento y promoción comercial.

Desde la entidad, señalan que entre los beneficios macroeconómicos que generan las ventas al exterior, se encuentra la mayor generación de empleo federal e inclusivo, debido a que las cadenas de exportación están presentes en todo el país y generan empleo para todos los niveles de calificación. Mayor acceso a divisas en la economía que permiten acceder a bienes importados, pagar las deudas del sector público y privado y acumular reservas internacionales.El problema es que, de no avanzar con este tipo de políticas, llegamos a donde estamos con una balanza de pago perforada en todos los aspectos.

“Sin aumento de exportaciones, una balanza de pagos saludable requiere acceder a financiamiento externo, necesario, pero aumentando el riesgo de reversión de flujos internacionales y/o depreciación de la moneda, dificultando la consistencia macroeconómica y las condiciones sociales”, dice la entidad. Tal vez, resulte familiar.

Entre los beneficios económicos, señala la CERA que las empresas exportadoras suelen ser más fuertes pagando mayores salarios, teniendo mayor inversión en innovación y capacitación, son más productivas y tienen menor exposición a shocks locales. Pero ¿Cuál es la situación de las exportaciones y las pymes argentinas?. Desde la Cámara indican que la evolución reciente de las exportaciones argentinas refleja un desempeño pobre. “Desde hace 16 años, las cantidades exportadas por Argentina se encuentran estancadas, aún en un contexto de aumento del comercio internacional”, explican. Más allá del signo político de los distintos gobiernos, de la evolución económica en el período y de la introducción de distintos planes productivos y exportadores, esto de mínima, habría que empezar a verlo.

Además, el número de empresas que vende al exterior se redujo en 1/3 en los últimos 15 años, con una preocupante baja en la tasa de natalidad de exportadores. Asimismo, la participación de las Pymes en la exportación ha caído al 7%, el valor mínimo de la última década, mientras que en los países en desarrollo representan en promedio el 18% de las ventas externas. Algunos datos. El máximo de empresas exportadoras fue de 15.075 en 2006. La cantidad de exportadores no manufactureros cayó 21% y la de manufactureros un 36%. El 74% del descenso total fue explicado por las Pymex manufactureras. La causa principal es el menor nacimiento de empresas exportadoras. La permanencia de empresas se mantuvo entre 75% y 80%.Por otro lado, la canasta exportadora exhibe un alto componente de bienes primarios, careciendo de la complejidad económica suficiente para alcanzar los objetivos de empleo y desarrollo. Se señala además, que la participación de las Pymex manufactureras fue de un 9% de exportaciones manufactureras totales en 2013 al 7% en 2022. La participación más baja de la década, y teniendo en cuenta que el promedio para los países en vías de desarrollo es del 18% (UNCTAD). La cantidad de Pymex en Argentina paso de 5.517 en 2013 a 4.131 en 2022 con una facturación por exportaciones promedio por empresa de menos de USD 1 millón. La participación más baja de la década.

Como dato alarmante, además de los mencionados, desde la CERA explican que a lo largo de los años, el país ha perdido participación en el comercio internacional, pasando del 0,52% en 1998 al 0,34% al 2022 tocando los módicos 0,25% en la actualidad. Parece que no somos el “granero” o “supermercado” del mundo. En Brasil también nos caemos, del 14% en 1996 al 5% en 2022. Pero el resto de América Latina no se cayó, EEUU tampoco, China creció y Argentina descendió en su relación comercial con este último país, siendo uno de los principales socios. Otra cuestión es la inversión extranjera directa. Desde la Cámara afirman que hay que partir de frases que sean ciertas, de datos duros. “Hace poco escuchamos que teníamos récord de inversión extranjera directa. Pero el detalle muestra que es toda deuda con casas matrices y reinversión de utilidades. Como las utilidades no se puede sacar, hay que reinvertirlas como no se pueden pagar importaciones, se endeudan con la casa matriz que pagó la importación”, comentaron desde la CERA. Y si no hay confianza, difícilmente haya inversión extranjera directa. Este factor de falta de confiabilidad, lleva a que, si bien se venda un commodity, cuando es un producto que tiene agregación de valor, hay que cumplir, ser confiable, hacerlo just in time y estar el día que la producción necesita. “Sucede que se creció en productos primarios, pero hay una caída sostenida en productos de mano de obra industrial y un estancamiento en mano de obra de origen agropecuario”, explica la Cámara.

Y si hablamos de confiabilidad, ¿qué riesgo tiene Argentina de que se incumpla con lo que se dice?. Desde la CERA señalan que es evidente. “Hoy tenemos la SIRASE y si no se cumple con pagar una muestra o la defensa de un caso de dumping, hay que cambiar las condiciones de venta porque no se puede cobrar el flete en Argentina, por ende, surge la demora. Por ello, la conclusión es que Argentina no es confiable”, señalaron. Según IERAL, la deuda del gobierno con los importadores se multiplicó en 80% con respecto al promedio histórico, llegando a USD 41.921 millones en agosto 2023.

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